Descripción
Son cuatro capillas las más significativas con las que nos vamos a encontrar a lo largo de los 18 kilómetros de recorrido.
Desde Trasmonte, ascendemos a la izquierda siguiendo la pista asfaltada que atraviesa el pueblo y que suavemente nos lleva por unas praderías a lo alto donde se encuentra la primera de las modestas construcciones, la Capilla de La Magdalena, la cual encontramos en el alto del cordal, la dejamos a nuestra derecha y continuamos nuestro camino que prosigue en dirección Norte, cresteando el espinazo de La Sierra del Pando.
Todas las capillas son modestas y algunas reformadas por los vecinos de los pueblos. Dejamos esta primera capilla y seguimos caminando por pista de tierra casi llana por la Sierra del Pando, dejando a nuestras espaldas la inconfundible silueta en pirámide del pico Caniella (Canietsas), para pasar muy pronto cerca de la pequeña laguna de Noceda y un poco más adelante la laguna de Caldevilla. Al fondo de nuestra izquierda se extienden las masas forestales de Moal y Muniellos; a la derecha el valle del Naviegu y mirando hacia atrás y derecha, el Cuetu Arbás y el cordal de Genestoso al Santuario del Acebo.
Continuamos por la pista que gira ligeramente a la derecha para acercarnos a una imperceptible prominencia que es el Pico el Cuervo (1.313 m) el punto más alto de nuestro recorrido, con caseta, mástil de antena y geodésico.
Después de la foto de rigor en el pico, continuamos en descenso, siguiendo siempre la pista, y pronto pasamos por las inmediaciones de la capilla de San Gervasio. Continuamos unos km a media ladera hasta dar un fuerte giro a la izquierda en una bifurcación, descendiendo a la Capilla de San Pelayo. Esta capilla tiene un espacio verde muy agradable, bajo un árbol, para hacer un descanso y sacar algunas fotografías, además de dos fuentes en sus inmediaciones. La continuación es más de lo mismo. Seguir la pista que ya nos acerca a la Capilla de San Antonio, ya muy cerca de nuestro destino. Seguimos la pista descendiendo y entre árboles ya vemos a nuestros pies a Cangas del Narcea. Descendemos y nos metemos entre sus calles para llegar a nuestro punto de destino.
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